A principios del año 2001, nuestro padre Roberto Crosa, apasionado del ciclismo y entendido en el tema, decide hacer un cambio y dedicarse a lo que tanto le apasionaba, fundando así, su taller de bicicletas. Hasta el día de hoy, a Roberto, se lo conoce como el bicicletero del barrio. ¡Ese de la calle Araoz!. Un hombre simple y honesto, de gran carisma, muy querido por sus clientes y el que siempre se ponía en el lugar de ellos brindándoles lo mejor de sí.
A fines del 2012 decidimos darle un vuelco al viejo taller de reparación, transformándolo en la bicicletería del barrio: “Bicicletas Araoz”.
Actualmente nosotros: Christian y Sandra Crosa, atendemos la bicicletería brindando el asesoramiento adecuado y personalizado, donde podés encontrar excelentes precios, la mas amplia variedad de bicicletas y accesorios e indumentaria.
Continuamos orgullosamente lo que nuestro padre empezó, con los valores que él nos inculcó y por sobre todas las cosas cuidando a nuestros clientes como él los cuidó. Te esperamos.